miércoles, 26 de enero de 2011

CAUSA CAUSAE EST CAUSA CAUSATI

Si una persona asesina a otra, valiéndose de un cuchillo, ¿quién es el asesino, el cuchillo o la persona?. Porque, lo que, realmente, lo ha matado han sido las cuchilladas.
Cuando una mano coge un cuchillo y éste se pone en funcionamiento, lo causado lo causa el cuchillo, pero él no podría hacerlo si no fuera por la mano y la mano no podría actuar si no le da la orden el cerebro, la conciencia, la voluntad de la persona.

La causa primera, (la persona), de la causa segunda, (el cuchillo), es la causa de lo causado por esta segunda causa.
No es un galimatías, sino fácilmente inteligible.

Donde no hay libertad no hay moralidad, por lo tanto no hay responsabilidad.

Inteligencia (saber lo que va a hacerse), voluntad (querer hacerlo) y libertad (poder hacerlo o no hacerlo) son los tres ingredientes, necesarios los tres, para la responsabilidad.

Por eso un niño, un loco, un anciano intelectualmente deteriorado, un sonámbulo, un zombi,…. que “no saben lo que hacen o lo que van a hacer” no son, moralmente responsables.

Por eso una persona obsesa, drogada, borracha,…. o una persona empujada, encadenada, obligada, presionada,… no es libre para quererlo o no quererlo y es, moralmente, no responsable.

Hablo de “moralidad y de responsabilidad moral”, no de “responsabilidad jurídica”.

Si se me rompen los frenos en el semáforo y le doy al de adelante, sin saberlo ni quererlo, al no ser libre para hacerlo o no hacerlo, además de que no lo quería y no era mi intención, no seré moralmente responsable (no tendré que confesarme de un pecado), pero, jurídicamente, tendré que pagarle los desperfectos y acarrear con las consecuencias.

Ese suicida asesino, que rodea su cuerpo de bombas y entra en el autobús para matar, al tiempo que se inmola, ¿es libre para hacerlo o no hacerlo?. ¿Obra coherentemente, según los esquemas mentales que le han impreso en su mente los ideólogos?. ¿Es responsable él o los ideólogos que le han lavado el cerebro y lo han programado, con mentiras y falsedades, para actuar?.

¿Qué diferencia hay entre este autómata programado para actuar y el cuchillo que va a clavarse en el cuerpo de la víctima, sin saberlo y sin quererlo?.

¿Son equivalentes la mano que empuña el cuchillo y el imán programador de la mente de quien va a inmolarse, matando?

¿Son igual de terroristas los asesinos que asesinan y huyen que quienes asesinan inmolándose?

¿Puede usarse el asesinato, como medio, para conseguir la independencia de una tierra, como fin?. ¿Están en el mismo plano, tienen el mismo peso, la vida humana y la independencia de un territorio?. ¿Cuáles son los valores de ambas?.

¿El fin justifica los medios?.

Los que justifican y jalean la violencia ¿no son co-causantes de la violencia?.

No hay nadie tan menos maquiavélico que Maquiavelo.

Es como el Arcipreste de Hita cuando decía: “si alguien quiere pecar, con pecado mortal, que sepa que puede hacerlo así, así y así, y aquí, allí y más allá…?. Él no decía que pecaran, sólo que si querían hacerlo….
Igualmente Maquiavelo, que le aconseja al Príncipe cuáles son los métodos, lo que tiene que hacer para conquistar, para conseguir el poder (si no lo tiene) o para mantenerse en él (si ya lo disfruta y lo ejerce).
Él no dice que lo haga, sólo dice cómo hacerlo (“ser león pero aparentar ser cordero”, “mandar a un enviado para que dé palos y luego congraciarse con los súbditos, que se le quejan, cargando contra el enviado, porque, así, aparece como el justo liberador de un pobre pueblo que ha sido….).

Pero ni Maquiavelo ni el Arcipreste de Hita son CAUSA CAUSAE, por lo que no se les puede cargar el marrón de lo CAUSATI. Las CAUSAS siempre serían el Príncipe o el pecador, que son los que saben, los que quieren y los que libremente lo habrían hecho.

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